El edificio está situado en el centro de Extramurs, uno de los barrios más concurridos de la zona, a las afueras de las murallas de Valencia. Tanto en el interior como en el exterior del edificio destacan los detalles de forja. La barandilla de la escalera posee un particular encanto y conserva los revestimientos cerámicos del zaguán y la escayola de los techos, tan característicos de la arquitectura de aquel momento.

Extramurs es un distrito residencial y un núcleo que ya se puede considerar histórico, porque casi la mitad de sus casas fueron construidas entre 1900 y 1960. Este distrito limita con Ciutat Vella, permitiendo disfrutar de las instalaciones y atractivos culturales e históricos del centro, pero en un área más relajada y tranquila.

El carácter del barrio es una combinación entre las tiendas y bares de toda la vida con la creación de nuevos espacios vanguardistas. Y si por algo se caracteriza es porque siempre hay gente por las calles.